Fuente: www.infosalus.com. EUROPA PRESS.
La OMS pide a los países más medidas para ayudar a dejar de fumar.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha presentado recientemente en Brasil un nuevo informe sobre la epidemia mundial del tabaco en el que, tras destacar algunos avances en la lucha contra el tabaquismo, ha solicitado a los países implantar más medidas para ayudar a la población a dejar de fumar. Y es que, tal y como ha evidenciado, muchas regiones todavía no han aplicado «adecuadamente» políticas que pueden salvar vidas, entre ellas las destinadas a ayudar el hábito tabáquico. Se trata de unas medidas contempladas en el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco que, tal y como ha recordado el organismo de Naciones Unidas, tienen una «ecacia demostrada» para reducir la demanda de tabaco. Entre estas iniciativas destacan las relativas a vigilar el consumo de tabaco y las políticas de prevención, proteger a la población del humo de tabaco, ofrecer ayuda para dejar el tabaco, advertir de los peligros del tabaco, hacer cumplir las prohibiciones sobre publicidad, promoción y patrocinio del tabaco, así como aumentar los impuestos sobre el tabaco.
«Los gobiernos deberían establecer servicios de apoyo al abandono del tabaco como parte de los esfuerzos por conseguir la cobertura sanitaria universal para todos sus ciudadanos. Dejar el tabaco es una de las mejores cosas que cualquiera puede hacer por su salud. El conjunto de medidas proporciona a los gobiernos los instrumentos prácticos para ayudar a las personas a liberarse del hábito, con lo que añadirán años a sus vidas y vida a sus años», ha dicho el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus. Los servicios para dejar el tabaco incluyen líneas telefónicas nacionales gratuitas, servicios de ‘mCessation’ para llegar a poblaciones más grandes a través de teléfonos móviles, asesoramiento por parte de los proveedores de Atención Primaria y tratamientos gratuitos de sustitución con nicotina.
Y es que, aunque se están haciendo progresos, ya que ya hay 2.400 millones de personas (2.000 millones más que en 2007) que viven en países que ofrecen servicios integrales para dejar el tabaco, la OMS ha avisado de que sólo 23 países están proporcionando esos servicios al nivel de las mejores prácticas. «El trabajo demuestra que los esfuerzos de los gobiernos por ayudar a la gente a dejar el tabaco funcionan cuando se ejecutan adecuadamente. Más países están haciendo que el control de tabaco sea una prioridad y de esa manera están salvando vidas, pero aún queda mucho trabajo por hacer. El informe de la OMS destaca los esfuerzos mundiales para ayudar a las personas a dejar de fumar y detalla algunos de nuestros logros más importantes», ha dicho el embajador mundial de la OMS para Enfermedades No Transmisibles y Lesiones y fundador de Bloomberg Philanthropies, Michael R. Bloomberg.
Además, el consumo de tabaco también ha disminuido proporcionalmente en la mayoría de los países, pero el crecimiento de la población ha hecho que el número de consumidores de tabaco siga siendo persistentemente elevado. En este sentido, el número estimado de fumadores es de 1.100 millones, de los cuales aproximadamente el 80 por ciento vive en países de ingresos bajos y medianos. En concreto, el informe, nanciado por Bloomberg Philanthropies, muestra que, aunque solo 23 países han aplicado al máximo nivel políticas de apoyo al abandono del tabaco, otros 116 países ofrecen servicios prestados en centros de salud y sufragan completa o parcialmente su costo, mientras que 32 que ofrecen dichos servicios, pero no sufragan su coste.
91 PAÍSES TIENEN PAQUETES DE ADVERTENCIAS GRÁFICAS DE GRAN TAMAÑO
Al mismo tiempo, más de la mitad de la población mundial (3.900 millones de personas que viven en 91 países), se benecia de la presencia en los paquetes de advertencias grácas de gran tamaño que cumplen todas las características recomendadas, y 14 países han puesto en vigor leyes sobre las advertencias grácas de gran tamaño al nivel de las mejores prácticas. El mayor crecimiento de la cobertura poblacional ha correspondido a los impuestos, el cual ha pasado de un 8 por ciento en 2016 a un 14 por ciento en 2018. Aun así, y aunque la subida de impuestos es la medida más ecaz para reducir el consumo de tabaco, sigue siendo la medida con menor cobertura poblacional. Asimismo, la OMS ha informado de que de los 5.000 millones de personas que están protegidas por al menos una medida para dejar de fumar, 3.900 millones viven en países de ingresos bajos y medianos (el 61 por ciento de la población de estos países); Y 59 países todavía no han adoptado ninguna medida al máximo nivel de ejecución, de los cuales 49 son países de ingresos bajos y medianos.
Del mismo modo, de los 34 países de ingresos bajos, 17 aplican al menos una medida al nivel de las mejores prácticas, cuando en 2007 eran solo tres los países que lo hacían. Un dato que, a juicio del organismo, demuestra que el nivel de ingresos «no es un obstáculo» a la aplicación de las mejores prácticas de control del tabaco. Finalmente, la OMS ha informado de que desde la publicación de su último informe ha habido nuevos países que han aplicado alguna de las medidas al nivel de las mejores prácticas: siete países (Antigua y Barbuda, Benin, Burundi, Gambia, Guyana, Niue y Tayikistán) han adoptado leyes integrales sobre espacios sin humo que abarcan todos los lugares públicos cerrados y todos los lugares de trabajo. Además, cuatro países (Arabia Saudita, Eslovaquia, República Checa y Suecia) han elevado al nivel de las mejores prácticas sus servicios para abandonar el consumo de tabaco; si bien durante este mismo periodo otros seis países bajaron del grupo con máximo nivel, con lo que se ha producido una pérdida neta de dos países.
Catorce países (Arabia Saudita, Barbados, Camerún, Chipre, Croacia, Eslovenia, España, Georgia, Guyana, Honduras, Luxemburgo, Pakistán, Santa Lucía y Timor-Leste) han adoptado advertencias grácas de gran tamaño en los paquetes; y diez países (Antigua y Barbuda, Arabia Saudita, Azerbaiyán, Benin, Congo, Eslovenia, Gambia, Guyana, Niue y República Democrática del Congo) han introducido prohibiciones totales de la publicidad, promoción y patrocinio del tabaco. Andorra, Australia, Brasil, Colombia, Egipto, Macedonia del Norte, Mauricio, Montenegro, Nueva Zelandia y Tailandia han subido recientemente los impuestos para que representen, como mínimo, el 75 por ciento del precio de venta al por menor.